Entrevista del Dr J.J. Castro sobre pesca submarina en «En Otra Línea»

José Juan Castro, doctor en ciencias del mar por la ULPGC, es entrevistado por Rosi Morera, en el programa «En Otra Línea» del Grupo Inverlia. El doctor responde a una serie de preguntas sobre su punto de vista sobre el actual estado de la mar y sobre el estudio sobre las zonas de pesca submarina que está llevando a cabo por encargo de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca.

 

 

En primer lugar podemos escuchar en la propia entrevista que él considera que no se necesitan más datos, los que ya hay son concluyentes y avanza que el estudio «es muy probable que salga negativo para la pesca submarina».

No queremos hacer una disección muy profunda de la entrevista, pero sí que queremos cuestionarnos algunas cosas que aquí se plantean, por no caer en la argumentación falaz «Ad hominem» o  «Ad ignorantian»… No podemos pensar que porque una eminencia proponga una serie de números estos tengan que ser reales, ya dice durante la entrevista que el margen de error es grande… tan grande que puede ser falso…

Resulta extraño intentar entender un estudio sobre pesca submarina donde no se irá a comprobar el número y talla de capturas a las zonas de pesca y se pretenden sacar conclusiones en base a encuestas anónimas que puede rellenar cualquiera desde cualquier parte del mundo, sencillamente afirmando de manera telemática ser pescador submarino sin ninguna prueba que lo acredite… entendemos que aquí va a faltar trabajo de campo, porque sea como sea el estado de las zonas de pesca submarina, a ver como achacamos a una determinada actividad  la ausencia de pescado… sobre todo si hay actividades que no sabemos lo que pescan…

El estudio de Castro empieza diciendo que en Canarias queda el 10% del pescado de hace 50 años, cosa que no entendemos posible que se pueda decir, pues desde el inicio queda patente que no hay datos. No hay datos pero el ofrece números, gráficos y porcentajes de manera constante y vehemente. Desde la ACPESUR no solemos quedarnos con los datos sin saber de donde vienen… y manos a la obra en las bibliografías encontramos el siguiente gráfico en un estudio del señor Castro de 2015:

 

 

Para nuestra gran sorpresa, este descenso del 93% incluye, y es casi en su mayoría, los datos de la pérdida del banco canario sahariano… amañando totalmente la afirmación, ya que ese pescado no nos lo hemos comido… sencillamente lo hemos dejado de pescar.

Cita un estudio del ministerio en 2006 (ESTUDIO) para publicar el siguiente dato:

«La pesca recreativa captura incluso más que la pesca profesional»

Pero se olvida de decir que el mismo informe recuerda que el impacto es bajo sobre la pesca de litoral, que es una actividad infravalorada por el dinero que reporta o que los números de la primera venta de 2006 (10 mil T), contra los que compara el estudio eran irrisorios y totalmente lejanos a la realidad, ya que podemos comprobar como la tendencia de los datos es ascendente, contra toda lógica en la documentación de la propia consejería, aparte de que el mismo estudio reconoce que la tercera parte de las capturas desembarcadas pasa por esta primera venta: PRIMERA_VENTA .

Aún así los datos de este estudio dicen que los pescadores submarinos cogen de media más de 11 kilos por salida, cosa ridícula, y no solo eso, que los cañeros de orilla cogen más de 6 kilos de media… un simple paseo por la costa cualquier día del año nos revelará la fiabilidad de los datos.

En otro orden de cosas, cuanto menos es curioso como Castro afirma que no tiene ningún dato de la pesca submarina y sin embargo asegura que hace especial incidencia sobre meros, abades, samas y brecas…  Es de sobra conocido que estas son piezas estrella, y son precisamente porque son las no habituales entre las capturas de la pesca submarina, siendo las brecas auténticas desaparecidas entre las capturas de pesca submarina. No entendemos del catedrático que se atreva a hacer este tipo de afirmaciones sin haber salido a la costa a revisar las capturas que hacen los pescadores en las zonas de pesca.

De momento no vamos a profundizar más, que sean nuestros lectores los que sigan sacando conclusiones… no queremos cerrar este análisis sin nombrar al Director General de Pesca del Gobierno de Canarias, Orlando Umpiérrez, que recientemente citó y asemejó este estudio con el de «Nasa sostenible»  para recordarle que uno fue sacado a concurso público, con un presupuesto de 100000 euros, dilatado en el tiempo y realizado por un ente que no ha tomado partido en pesquerías, mientras que el de pesca submarina lo asigna a dedo, por menos de 18000, con unos meses para ejecutarlo y lo realiza un reconocido detractor de la pesca recreativa. Los actores, el presupuesto y el tiempo no encajan… bueno, sí, para algunos sí…